Si hay algo que convierte nuestra casa en característica, es sin duda lo que nos impliquemos en ella a la hora de personalizarla. Y como si hay un material al alcance de todos, ése es sin duda el protagonista del post de hoy, queremos mostrarte unas cuantas geniales ideas de cabeceros con pintura para que te atrevas a personalizar el tuyo de la más original y sencilla de las formas. Toma buena nota ¡porque te van a encantar!
Las habitaciones infantiles serán candidatas perfectas
Qué mejor estancia para despertar al artista que llevas dentro, para apostar por colores imposibles y animarte con disparatadas locuras que encantarán a los más pequeños de la casa. En el ejemplo que te muestro en primer lugar, incorporar el arcoíris para decorar al tiempo que hace las veces de cabecero, resulta una idea tan visual como bonita que además de abrigar visualmente el lugar de descanso de la pequeña de la casa, llena de color la pared principal del dormitorio.
Superpón distintas formas
Aunque algo más entretenida, la iniciativa de incorporar varias capas de distintas formas para personalizar tu cabecero hecho con pintura, bien merece que la tengas muy en cuenta. Alarga su longitud hasta acoger con ella las mesitas de noche, apuesta por subir algo más en altura para cambiar por completo la visión de dicha pared e incluso huye de las líneas rectas si persigues una estética más creativa y volátil.
Huye de lo convencional
Apostar por lucir colores, formas e ideas bien distintas a las que estás acostumbrado a ver, puede llevarte a explorar (y presumir) de maravillosos y variopintos resultados. Y es que estrenar cabecero y decorar la pared donde apoyas la cama al mismo tiempo, es más que posible si huyes de lo convencional y te animas a explorar de la mano del color de pintura que más te guste.
Cabeceros con pintura (y cinta de carrocero)
Apoyarte en un material tan cotidiano como la cinta de carrocero, podrá llevarte a explorar formas y resultados estupendos, súper divertidos ¡y bien fáciles de conseguir! Y como para muestra un botón, mira el resultado que han conseguido con tan sólo pintar con ella un rectángulo y un montón de líneas dispuestas a la misma distancia unas de otras. Pintas sobre el espacio libre, retiras la cinta con la pintura aún fresca, et violà!
Crea un espacio distinto
Pero si lo que te apetece es animarte con una imagen e idea bien distinta, hay todavía más opciones para ti. Para conseguir una sensación de independencia única en torno a la zona del cabecero de tu cama, piensa en tres dimensiones y pinta un prisma al que obviamente, sólo le falte una cara. Casi sin darte cuenta, materializarás el espacio más íntimo y especial de tu dormitorio. ¡Anímate a probar y me cuentas! ;)
Que las esquinas también cuenten
Ya sea porque no cuentas con mucho espacio libre, o porque quieres dar un toque distinto y poco usual al espacio, tener la cama en un rincón de la habitación también te permitirá sacar partido a la propuesta de crear cabeceros con pintura. Aborda la creación de dicho elemento hasta más allá de donde termina la pared en la que apoya la parte alta de la cama ¡y alucina con el cambio que dará la estancia!
Juégatela con el color
Otra buena idea pasa por acudir a la forma o versión «de siempre» pero aprovechando para incorporar un color sorprendente y para nada esperado en la estancia. Contraste en forma de toque fresco y atrevido al alcance de todos que si no incorporas ¡será porque no quieres! ;)
Aprovéchalos para contrastar en ambientes monocromos
Los cabeceros con pintura, son una excelente apuesta si te parece que has abusado de un único color en el dormitorio y te gustaría cambiar por completo su estética de forma sencilla y bien efectiva. ¡Mira cómo lo han conseguido en el dormitorio infantil del ejemplo que te muestro!
Como ves, animarte a dar forma a tu propio cabecero utilizando únicamente pintura, puede darte estupendas alegrías tan originales como decorativas. ¡Lo complicado será decidirte por una única idea!