Cualquiera que tenga un balcón con unas buenas vistas sabe de sobra lo agradable que es sentarse a disfrutarlo. Pero no siempre es posible ya que hay días en los el clima, la temperatura o el polen son los protagonistas, por lo que muchos deciden realizar un cerramiento. Sin embargo, la mayoría se preguntan cómo cerrar un balcón sin perder las vistas. Y es que instalar un cerramiento puede significar que habrá que sacrificar ese preciado paisaje, pues la mayoría de cerramientos tienen marcos toscos y grandes. Incluso si son muy elegantes, la perfilería estorba en el campo visual.
Lo bueno del mundo del diseño es que siempre hay una solución para la mayoría de problemas. En este sentido, puedes mantener y disfrutar de tus vistas instalando PremiumGlassCerramientos en tu balcón. Hoy te contamos como para que en tu balcón nada de estorbe.
Cerramientos panorámicos en tu balcón

Cuando se trata de no perder las vistas, el mejor tipo de cerramiento es el invisible o panorámico. Se trata de cerramientos con cortinas de cristal. Aunque ya llevan algunos años entre nosotros, no dejan de ser toda una revolución en el sector de los cerramientos. Tanto por su estilo, como por lo prácticas que son, es una de las tendencias top de interiorismo que no para de crecer.
Las cortinas de vidrio son paneles de vidrio que no tienen marcos ni perfiles entre si. Para instalarlas, se sujetan al suelo y al techo mediante carriles. De este modo dejan la vista completamente libre, sin obstáculos de ningún tipo. Lo único que es perceptible son las juntas entre cada lámina de cristal, que apenas se ven porque son de silicona y resina semitransparente.
Sin duda, esta es la mejor forma de cerrar un balcón sin perder las vistas. Por eso se les da el nombre de cerramientos panorámicos, ya que permiten tener una vista espectacular a la vez que se disfruta de todos los privilegios de un espacio cerrado.
Ventajas de los cerramientos panorámicos para balcones

Lo mejor todo es que la cosa no se queda ahí. Los cerramientos panorámicos se están imponiendo porque implican las siguientes ventajas:
- Son 100% abatibles hacia el interior. Esto significa que podrás abrir cualquier cortina de cristal como si se tratase de una ventana en tu balcón. Además, esto hace que limpiarlas sea coser y cantar, pues no será necesario asomarse al exterior para limpiar ambas caras del vidrio. Eso si es un diseño que piensa en la seguridad.
- Se deslizan, generando una apertura de hasta el 95%. Para esos días en los que apetece disfrutar del aire libre, puedes abrir las cortinas de cristal y deslizarlas todas hacia un lateral. Como se apilan, apenas ocupan espacio, otorgando más apertura que cualquier otro tipo de cerramiento.
- Son modulares. Esta instalación funciona tanto en conjunto como de forma independiente. Esto significa que puedes abrir o cerrar un solo panel o varios en diferentes puntos. Esto es fantástico si quieres disfrutar del exterior pero corre viento desde una dirección concreta.
- Cuando las cierras se convierten en un buen aislante entre la temperatura interior y exterior. Esto facilita la aclimatación del hogar o negocio. Además, hace que ahorres en calefacción y aire acondicionado en las salas interiores ya que el balcón actuará como una enorme cámara de aire. Además, también reducen la entrada de ruidos hasta en 30Db.
Como instalar cortinas de cristal para no perder las vistas en tu balcón

Si estás pensando en instalar cortinas de cristal, te recomendamos que visites este sitio. Se trata de grandes profesionales con más de 10 años instalando cortinas de cristal en toda España. Además, ofrecen una garantía de 5 años. Gracias a su experiencia, son capaces de tener el cerramiento listo en 2 o 3 días.
Por otro lado, si no quieres que tu casa o negocio estén impedidos por la instalación, no hay nada de lo que debas preocuparte. Poner cortinas de cristal apenas supone inconveniente, pues salvo excepciones, no requiere de obras. Las piezas se hacen a medida para que encajen en la estructura existente. Además, se adaptan prácticamente a cualquier tipo de balcón. Grandes, pequeños, angulosos, curvos, etc. No hay espacio que se le resista a las cortinas de cristal.