El recibidor es una de las partes más importantes de la casa, es una estancia pública que sirve para dar la bienvenida cada dia y anticipa lo que será el resto de nuestro hogar, ya que en él las visitas tendrán la primera impresión de la casa. También es una zona de paso donde se dejan los abrigos, paraguas, bolos, incluso los zapatos…
Una decoración adecuada, con elementos sencillos y prácticos creará el ambiente perfecto para recibir a las visitas. Se debe decorar con pocos elementos y muy bien escogidos, un paragüero, un cuadro o un espejo, alguna planta o adorno floral y una buena iluminación son los elmentos imprescindibles. El estilo de esta estancia tiene que cuidar los detalles sin recargar, como el recibidor suele ser una estancia pequeña, se debe pintar con un color frio para agradarla visualmente y se debe luminar con una luz indirecta.
Un elemento esencial dentro de esta antesala es el paragüero. Además de estar dispuesto para colocar los paraguas y bastones al llegar de la calle, puede servir como un hermoso accesorio ornamental.
Podemos elegir entre multitud de colores, formas y estilos y así adaptarlo al resto de la decoración. Son variados los materiales empleados para su fabricación, metal, cerámica, barro, madera… La selección del modelo depende del gusto de cada uno ya que es amplio el abanico de posibilidades, tenemos mucho donde elegir desde el estilo más clásico hasta el diseño mas vanguardista.
Se observa en muchos paragüeros un diseño encantador y materiales originales, incluso los hay de piedra, lo que garantiza la fortaleza, estabilidad y una discreta elegancia. Formas extravagantes y asimétricas suelen despertar gran interés en paragüeros de metales como acero, cobre, latón, combinados con otros materiales como el vidrio.
El paragüero es el complemento indispensable e ideal para vestir el recibidor, entre la infindad de formas y colores si nos atrevemos a dar un toque personal y diferente a nuestro vestíbulo lo mejor es optar por un modelo poco convencional aunque también hay modelos clásicos con gran personalidad, equilibrio y elegancia.