Mientras algunos no paramos de darle vueltas a la multitud de formas que hay para aprovechar bien el espacio de una habitación, otros ya han encontrado como hacerlo y encima con estilo.
Este es el caso de la habitación de Sofía, un cuarto de tamaño bastante reducido pero muy bien aprovechado, que con elementos nuevos y reciclados, han diseñado una habitación infantil que gustará a niños y mayores.
El mobiliario se ha colocado junto a las paredes, dejando en la zona central más espacio para poder moverse sin dificultad. Al tratarse de una habitación de descanso y de juegos, los elementos están mezclados, por eso junto a la pequeña cama–cuna de estructura blanca encontramos una mesa con sillas para sentarse a dibujar. Una combinación que puede parecer extraña, pero combinan a la perfección aunque sirvan para momentos del día muy diferentes.
Un detalle muy original es la forma en la que han protegido la cama de los primeros rayos de sol. Al no haber cortinas en las ventanas, han colocado una hoja a modo de parasol, que protege la cara de la niña para que la luz no la despierte.
Decimos que el espacio esta muy aprovechado, ya que no sólo encontramos almacenaje en la pared frontal o bajo la cama, sino que en el interior del armario también encontramos más sorpresas.
Han aprovechado la pequeña estatura de la niña, para colocar a más altura la barra para colgar ropa, dejando la parte inferior más despejada. Esto les ha permitido montar ahí la cocina de Sofía, una cocina grande con muchos elementos que necesitan espacio para moverse.
Cuando termina de jugar, con cerrar las puertas del armario ya queda todo recogido y sin elementos desperdigados que desordenen la habitación. También ayuda a no ver la habitación recargada, algo que es normal con tan poco espacio disponible.
Una decoración sencilla, original y muy divertida.
¿Qué os ha parecido?