Las humedades son uno de los problemas más comunes de una vivienda, ya sea de nueva construcción o no, y es algo que, si no le pones freno, puede arruinarte toda tu casa, ya que puede impregnar de agua tus muebles y aparatos eléctricos, con el consiguiente peligro tanto para ellos como para la salubridad de tu casa.
Además, no se nos puede escapar que las humedades son un problema de salud grave, ya que en ella viven microorganismos como los Aspergillus que están muy relacionados en estos casos con infecciones respiratorias y alergias.
Por otro lado, para poder combatir las humedades lo mejor es conocerlas un poquito, así que te dejo una lista justo a continuación con las tres causas más comunes por las que a una vivienda le sale humedad.
- Humedades por condensación: se provocan por la actividad diaria, como por ejemplo ducharse, se produce un vapor de agua que, si la estancia no tiene la suficiente ventilación o bien la pintura del baño no es lo suficientemente permeable a la larga nos dará lugar a un problema de humedades.
- Humedades por capilaridad: La capilaridad es una propiedad muy útil del agua, pero en estos casos nos hace la faena. Es la propiedad por la cual el agua «escala» a través de los muros o de los tejidos. Para que no se suene a chino, es lo que ocurre cuando está lloviendo y se te mojan los pantalones, que al final acabas calado hasta las rodillas, pero en su versión de edificios.
- Humedades por infiltraciones: esto ocurre en los edificios en la parte que está por debajo del suelo, por ejemplo, en garajes o sótanos, el agua se infiltra en el terreno colindante y si no tenemos un buen aislamiento, ten por seguro que aparecerán las humedades en tu vivienda.