Si tu entrada no es precisamente el lugar más amplio y despejado de casa, tranquilo. No te pasa a ti solo. Verte abocado a tener que contar en el mejor de los casos con un recibidor mini ante la aparente inexistencia de un lugar para darle cabida, puede ser todo un bajón inicial. ¡Pero nada más lejos de la realidad! Y es que teniendo en cuenta los tips que te propongo hoy, disfrutar de un pequeño recibidor al que no le falte de nada será más que posible. ¿Quieres saber cómo conseguirlo? Pues toma buena nota ¡que comenzamos!
Da cabida sólo a lo que verdaderamente necesitas
Cada uno esperamos o necesitamos cosas distintas a la hora de entrar y salir de casa. Si te descalzas al entrar precisarás una butaca o banquito donde sentarte. Si tienes un armario empotrado en el vestíbulo quizá puedas prescindir de colgadores. Y si sois cinco en casa claramente necesitarás más accesorios que quien viva sólo o en pareja. De un modo u otro, lo que está claro es que para optimizar el espacio de tu recibidor mini, has de estudiar tus movimientos, necesidades y día a día para que resulte sumamente práctico y funcional. Ya que sólo puede ocupar un pequeño espacio, mejor no desaprovecharlo ¿no crees?
Utiliza un colgador como elemento principal
Es de lo más habitual que la llegada a casa pida a gritos despojarse de todo aquel accesorio que portamos a lo largo del día. Bolsos, mochilas, abrigos, complementos, llaves… y todo elemento que sea susceptible de poderse aparcar una vez cruzamos la puerta de nuestro dulce hogar, será lo primero de lo que queramos deshacernos. De modo que si el espacio no te da para nada más, unas perchas no te pueden faltar. Individuales, múltiples, colocadas en vertical, dando lugar a una original composición… Sea cual sea la versión por la que apuestes, darles cabida en tu recibidor mini será acierto seguro.
Crece en altura si necesitas un plus
Y es que aprovecharla al máximo puede que ser la única forma de contar con todo lo que necesitas que dé de si este espacio. No olvides que el recibidor es la carta de presentación de tu hogar, así que mimar las decisiones que tomes, influirá muy directamente en la primera impresión que cause tu casa desde el primer momento.
Aumenta su sensación de amplitud
Tanto si cuentas con poca luz natural en este espacio, como si eres amante de echarte el último vistazo antes de salir de casa, está claro que lo que necesitas en un amplio espejo en esta zona. Además, este elemento te ayudará a potenciar la sensación de amplitud visual. Factor que agradecerás en un espacio tan pequeño de casa.
Utiliza mobiliario versátil
Si tu recibidor mini necesita aportarte exactamente lo mismo que el más amplio de todos ellos, es momento de analizar qué piezas pueden hacer más por ti. En el caso del ejemplo que te muestro a continuación, han cubierto la necesidad de almacenar con un baúl que una vez cerrado, potencia la sensación de orden en una zona de paso que no puede permitirse otra cosa.
Menos puede ser más en tu recibidor mini
Encontrar el auxiliar ideal para el pequeño espacio con que cuentas será crucial para aprovecharlo al máximo. Y como para muestra un botón, fíjate lo que puede llegar a dar de sí un perchero de pared con repisa.
Emplea auxiliares que puedas colocar en vertical
Los elementos de almacenaje o auxiliares que te permiten su empleo en vertical, pueden suponer un antes y un después en la funcionalidad de tu recibidor mini. Escógelos bien, monta el puzle que tu espacio te permita ¡y presume de nuevo rincón de bienvenida a casa al que no le falte detalle!
Como ves, tu recibidor mini puede llegar a dar muchísimo de si. Estudia bien el espacio con que cuentas, apuesta por los elementos necesarios a los que sacar todo el partido ¡y presume de resultados de revista a la par que funcionales casi sin darte cuenta!