Pino, hierva, oliva, lima, menta… Emplear el color verde en decoración puede dar lugar a un sinfín de tonalidades y opciones decorativas, pero ante todo, representa la opción perfecta para dar un toque fresco y vivo a la decoración de tu hogar en cualquier estancia y lugar en que te apetezca emplearlo.

Se trata de un color asociado a la positividad, a la alegría, a la paz y a la armonía y es fácilmente acoplable a cualquier estilo decorativo y estancia de la casa. Ya sea a través de elementos constructivos, mediante el uso de elementos decorativos o también naturales, a través de plantas, empleados en mayor o menor medida, acudir al color verde en decoración, combinado correctamente con otros colores, resultará una apuesta segura que aportará un extra de frescura a cualquier estancia o ambiente que se precie. ¿Quieres ver unas cuantas ideas para incorporarlo de manera acertada?
Verde en las paredes
Si te gustan los contrastes y cambios atrevidos, optar por incorporar el color verde en las paredes (o de forma moderada en alguna de ellas) puede resultar una opción la mar de enérgica. Eso sí, ten muy en cuenta, a la hora de ponerte manos a la obra, que la elección de la tonalidad causará distintos efectos en ti y los tuyos dependiendo del caso.
Escoge, a ser posible, tonalidades de verde pastel o suaves tipo, verde mint o similar. Pero ante todo, si no quieres dar lugar a un ambiente estridente y de cierto desasosiego, huye de las tonalidades de verde demasiado vivo, sobre todo en amplios paños de pared, si no quieres terminar cambiando de color más pronto que tarde.

Otra forma moderada de hacerlo será aportando este color en distintas áreas bien diferenciadas de las paredes. Realizar figuras o estampados geométricos con él, o animarte a dar forma a un llamativo y original zócalo, como el de la imagen que a continuación te muestro podrá ser otra divertida opción. ¿Qué te parece el resultado que se obtiene?

Mediante la incorporación de elementos decorativos
Decorar con color verde el hogar puede llegar a ser cuestión hasta de pequeños detalles que terminen siendo los encargados de llevar todo el carácter y peso visual de la estancia en cuestión. Desde un elemento del mobiliario, como puede ser un sofá o cualquier tipo de mueble, hasta incorporarlo a base de pequeños detalles que aporten el color, como pueden ser los textiles a través de alegres estampados de verano, cortinas, o pequeños detalles decorativos.

Observa la siguiente imagen a la hora de decorar un dormitorio pequeño. La estancia es claramente blanca en su totalidad, pero los aportes de color verde a través de los elementos textiles y la planta existente se encargan de dar el toque vibrante, personal y fresco a una estancia, que en inicio no poseía ningún atractivo visual.

Tampoco podemos olvidarnos de utilizar alfombras con tonos verdes para vestir el suelo de nuestros dormitorios. Alfombras que darán un toque de calidez a la estancia, además de color.
A través de elementos naturales
Puede que los elementos naturales sean los mejores y más fieles aliados a la hora de aportar el color verde en decoración, y es que no habrá forma más fresca y natural de dar el toque de este color, que pueda resultar más armoniosa que ésta.

Las plantas, como tal, representan la presencia natural en este color de forma más básica. Aunque la incorporación de distintas modalidades vegetales que presenten flores, al mismo tiempo, también darán al ambiente el toque fresco propio de este color.

El color verde en decoración: Combinaciones para emplearlo
Verde y blanco
Será la opción ideal si andas en busca de armonía y sofisticación en tus ambientes. Dan lugar a entornos más ligeros y luminosos, y con el tiempo, cansarse de ellos resultará mucho más complicado.

Verdes de distintas tonalidades
Aunque puede resultar una técnica más que arriesgada, jugar a mezclar distintos tonos puede dar como resultado una estética sorprendente. Fíjate, si no, en el resultado que se ha obtenido al emplear varias tonalidades para decorar esta mágica y peculiar habitación infantil.

Verdes con marrones o tonos terrenales
Para no crear una sensación de pantalla visual, intenta que halla el suficiente contraste entre las tonalidades. Por ejemplo: si tus muebles son de una tonalidad de marrón medianamente oscuro, y estás pensando en incorporar un color verde en decoración, intenta que este resulte más bien clarito. Jugará con el contraste del marrón del mueble y visualmente ambas tonalidades lucirán con luz propia. Del mismo modo, te recomiendo que actúes en el caso contrario.

Como has podido ver, el color verde en decoración puede ofrecernos un montón de interesantes posibilidades que te atraerán de una forma u otra a incorporarlo en la decoración de tu casa sobre todo de cara a las estaciones más cálidas del año. ¿Lo incorporarías ahora en tu decoración?