Las cortinas son una parte imprescindible de la decoración de cualquier hogar, parece que forman parte de nuestras paredes y realmente así es. Las cortinas hacen una función estupenda para protegernos del frío en invierno, del calor en verano, y sobre todo… para resguardarnos de miradas ajenas proporcionándonos gran intimidad.
Pero la elección de las cortinas no es tarea fácil, puesto que si no las eliges bien puedes arruinar la decoración de una estancia entera ¡hay que darles la importancia que se merecen! Hoy quiero darte algunos consejos para que puedas elegir bien las cortinas y que además, sea un acierto en la combinación de tus paredes.
La forma y el color de la cortina dependerá del lugar donde vivas para saber si las necesitas más gruesas o más ligeras, además la estética de tus cortinas dependerá de la decoración de la estancia. Si no puedes cambiar las cortinas en verano y en invierno, una idea es seleccionar unas cortinas dobles para que las telas más ligeras sean las que están más lejos de la ventana y la más pesada más cerca, de esta manera en verano podrás abrir las que son más pesadas para que pase mejor el aire.

Tendrás que medir la anchura de la pared para saber cuál deberá ser la anchura de la cortina, lo normal es que vaya acorde con la anchura de la ventana o de la puerta del balcón. En cambio la altura de la cortina tendrá que tenerse en cuenta según la distancia de la parte superior del riel de la cortina y del dobladillo de la misma. No coloques la barra justo encima de la puerta o de la ventana, mejor varios centímetros por encima (entre 15 y 20 cm).
Además recuerda que los colores que escojas para tu cortina, deberán encajar bien con el resto de la estancia ¡sigue el equilibrio!