Decorar tu espacio puede resultar más sencillo de lo que piensas. Con materiales que tenemos por casa, o fáciles de conseguir y económicos podemos crear artículos de decoración perfectos para los rincones favoritos de tu casa.
¿Cuánto tiempo llevas con esa bombilla solitaria colgando del techo de tu habitación? Más de un año diciendo: el mes que viene compramos una lámpara sí o sí. Deja de hacerte promesas que no vas a cumplir y ¡ponte manos a la obra!
En este post vamos a aprender cómo hacer una lámpara con cucharas de plástico, las típicas que guardas en el cajón porque sobraron del último cumpleaños.
SOLO NECESITAMOS:
- Una garrafa de plástico de las de agua, de unos 5 litros, a no ser que necesites una lámpara más pequeña y busques una botella que se adapte al tamaño que deseas.
- Una bolsa de cucharas de plástico blancas.
- Un cúter.
- Cola de contacto. Si tienes oportunidad de conseguir una pistola de silicona, mucho mejor.
Una vez tengamos todos los materiales, los pasos a seguir son muy sencillos. Vayamos poco a poco.
- Vamos a cortar la base de la garrafa, que será la base de nuestra lámpara y así permitiremos la ventilación de la misma.
- Cortaremos el mango a todas las cucharas dejando solo la parte cóncava de las mismas.
- Ahora cubriremos, con ayuda de la cola o silicona, todo el cuerpo de la garrafa con las cucharillas. Haciendo que éstas simulen escamas y queden más o menos como se muestra en la imagen.
- La parte superior de nuestra garrafa, que será la parte que se sostendrá al casquillo, se cubrirá también con cucharas formando un círculo, también a modo de escamas que acompañarán al resto de la lámpara.
- Ya casi lo tenemos. Solo queda colgar nuestra lámpara del casquillo (éste irá por dentro de la estructura que hemos creado) teniendo mucho cuidado de que la bombilla no roce con el plástico.
Y Fin. ¡Lámpara nueva para tu habitación!
